Preocupaciones francesas por la gira del presidente chino por Africa Revista de prensa europea por Tatiana Miralles
Artículo publicado el 10/02/2009
En esta revista de prensa nos hemos detenido en las preocupaciones francesas del diario Le Figaro por la gira del presidente chino por Africa. Una serie de visitas que empiezan hoy en Arabia Saudi: "escala obligada teniendo en cuenta que el país del Golfo es el primer proveedor de petróleo a China", dice el diario, "pero ¿qué tiene que hacer el presidente Hu Jin Tao en Mali, Senegal, Tanzania o Isla Mauricio?¿Asistencia gratis para ayudarles a luchar contra la crisis?", se pregunta con ironía en la página especial dedicada a esta gira. "China quiere demostrar que Africa no es para ella sólo terreno de extracción contrarreloj de materias primas", dice el corresponsal del diario desde Pekín, "de hecho, el presidente ha afirmado que China no sólo basa sus relaciones con Africa en la energía y los recursos naturales". Un "no sólo" hecho a la medida de Pekín. Allá va el presidente a asegurar a los países africanos que no reducirá sus ayudas, es más, que las aumentará "en momentos en que la crisis hace temer que los países occidentales disminuyan las suyas. China aprovecha así y marca puntos". Más de los que ya tiene. El gigante asiático tiene firmados acuerdos con 48 de los 53 países africanos.
Pero bueno, volvamos a la pregunta de Le Figaro: "¿por qué esos países en los que no hay petróleo?"
"Senegal no es país central del continente, cierto, pero tiene minas de hierro, de fosfato y de oro y aunque China no las toca por ahora, está tejiendo su fina tela diplomática", dice el diario, haciéndonos pensar en China como en una araña peluda con hilos de seda. Y otra cosa tiene Senegal: petróleo, en la región de Casamance, y "China ya le ha echado el ojo, aunque se considere que ese crudo no es rentable, una condición que podría cambiar".
Otro país que el presidente Hu visita: Mali. "Es el oro de ese país lo que hace correr al presidente chino hasta allí", afirma Le Figaro que, acto seguido sigue analizando los intereses de China en los países a priori secundarios en Africa Sub Sahariana. En Tanzania, China tiene y quiere ampliar arrozales para asegurarse el bajo costo de los alimentos para su propia población. Pero el gran proyecto de Pekín es crear tres grandes zonas económicas en Africa: una en Zambia, dedicada a los minerales; otra en Tanzania como una plataforma de transportes entre Asia y el continente; y la tercera en Isla Mauricio como un centro de comercio entre los dos continentes. "Tres proyectos alejados de las preocupaciones humanitarias", dice Le Figaro, "porque como dice el proverbio chino: para quitar, hay que saber antes dar". Y eso es lo que hace China según el diario, sin ningún titubeo ni la discreción de hace unos años. Ahora a cambio de los subsidios, Pekín espera de Africa apoyos en las votaciones de Naciones Unidas, por ejemplo. "Que no se sorprenda Francia, que es lo mismo que ella hizo durante 50 años", advierte Le Figaro y se pregunta para terminar, "¿sabrá Francia defenderse de esto?"