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Sarkozy estrecha lazos con Marruecos con la firma de 15 contratos millonarios El rey marroquí desea que la visita sea «símbolo de relaciones estratégicas» entre ambos
(actualisé le )
Pedro Canales. Tánger-
El presidente francés inició ayer una visita de Estado a Marruecos, que el rey Mohamed VI quiere que sea «símbolo de las relaciones estratégicas» entre los dos países. Tras su llegada a Marrakech, donde fue recibido por el rey en el aeropuerto, se trasladaron al palacio para iniciar conversaciones directas. El presidente francés lleva en cartera no menos de quince importantes contratos con el Reino alauí. Mientras España sigue de observadora ante el recalentamiento de relaciones entre Marruecos y su antigua metrópoli protectora, Sarkozy, al que acompañan una plétora de ministros y 70 jefes de empresa, lleva en cartera la firma de un protocolo para la construcción de un tren de alta velocidad por la empresa Alshtom, que unirá Marrakech y Tánger, un proyecto valorado en unos 3.000 millones de euros y que deberá entrar en funcionamiento a partir del 2012.
El estadista francés cerrará también un acuerdo para la construcción de una central nuclear para la producción de electricidad en la región de Marrakech, y la venta de aviones Airbus. El consumo de electricidad en el reino tiene un fuerte aumento y el país sufre un déficit importante de producción. Marruecos ha sondeado la posibilidad de adquirir centrales nucleares a Estados Unidos y China.
La industria armamentista francesa no se quedará a la zaga. Aunque Marruecos parece haber optado definitivamente por la adquisición del cazabombardero F-16 norteamericano, frente a la oferta de los «Rafale» galos, Rabat encargará una fragata polivalente Fremm a Marruecos por valor de 500 millones de euros, así como otro material bélico. Según fuentes consultadas por LA RAZÓN, Arabia Saudí, garante de la financiación de los aviones de guerra, propuso al monarca alauí incluir la adquisición de los F-16 en un paquete de compra de material norteamericano destinado a Riad, cuyo valor oscila en torno a los 15.000 millones de dólares.
Además de estos macrocontratos, Francia firmará otros acuerdos económicos y comerciales con Marruecos, enganchando definitivamente la economía marroquí a la francesa. París es el primer proveedor, el primer cliente y el primer inversor en Marruecos. Así, Renault acaba de firmar un acuerdo para la construcción de una fábrica de montaje en Tánger con capacidad para producir 200.000 vehículos anuales. Sarkozy tiene prevista una visita a la obra el miércoles, así como al futuro puerto Tánger-Med de construcción francesa.
El volumen de intercambios comerciales francomarroquíes se situó el año pasado en 6.400 millones de euros; las inversiones directas francesas fueron en 2006 de 850 millones de euros, un 31% del total. Sorprendentemente, Marruecos ha aceptado que Vivendi adquiera la mayoría del capital de la estratégica Maroc Telecom. Las inversiones cruzadas son cuantiosas. La parte francesa en el holding real ONA, primera empresa privada en Marruecos, sigue siendo sustancial.
Francia otorgará a su anfitrión facilidades financieras para proyectos en el sector energético, pesca, infraestructuras, telecomunicaciones, agua y medio ambiente.
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