Foucault, “el teórico de la destrucción de la escuela y de la autoridad” Claudia Peiró 13 de julio de 2024
"Occidente, palabra desagradable de utilizar", decía Foucault.
El 25 de junio se cumplieron 40 años de la muerte del filósofo francés Michel Foucault. Un par de artículos de los deconstructores locales aludieron en Argentina a la “vigencia” de su pensamiento. Vaya si tienen razón, pero no es para celebrarlo. No hubo ninguna referencia al daño que Foucault y sus seguidores le han hecho a la sociedad: inseguridad, abolicionismo penal, crisis de la salud mental, decadencia escolar; todo eso lleva su impronta.
El pasado martes 2 de julio, un joven funcionario de la Municipalidad de Almirante Brown, en el conurbano bonaerense, fue asesinado de una puñalada por un paciente esquizofrénico. Es una noticia recurrente, la de enfermos mentales y adictos que cometen o son víctimas de actos violentos por no estar bajo adecuado tratamiento. Precisamente un aspecto de la herencia foucaultiana es la abolición de la psiquiatría, que para el filósofo francés no era más que una herramienta de control social.
La Argentina ha sido el laboratorio por excelencia de toda la legislación deconstructivista inspirada en pensamientos como el de Foucault. Uno de sus experimentos es la Ley de Salud Mental promulgada en 2010, una norma que rodea a la práctica psiquiátrica de las peores sospechas —equiparando los tratamientos a la tortura— y cuyo órgano revisor está formado por una ONG de Derechos Humanos… Esta ley, de clara inspiración foucaultiana, dificulta casi al punto de imposibilitarlo el internamiento de pacientes psiquiátricos, con los resultados que podemos constatar.
Ver en línea : El Manifiesto
