Salud

El efecto de las drogas desde dentro

VANESSA G. FERNÁNDEZ

BARCELONA.- Las drogas están en la calle, pero ¿estás realmente informado de sus efectos? ¿Eres capaz de decidir por ti mismo? En CosmoCaixa, toca ’Hablar de drogas’, una completa exposición en la que aprenderás a distinguir entre las diferentes sustancias y sus efectos en el cuerpo.

En esta muestra interactiva, que recorrerá diferentes ciudades españolas, conocerás de forma práctica los efectos de las drogas. En maniquís humanos podrás ver la evolución cerebral de una persona adicta y podrás apreciar cómo la región de la corteza se hace más pequeña por el consumo de estupefacientes. Incluso se puede comparar dos telarañas de lo más diferentes: una densa y perfectamente tejida por una araña normal, y otra red con muchos con muchos agujeros y desestructurada tejida por una araña expuesta al consumo de LSD.

A través de un simulador del juego de la ruleta rusa, verás las probabilidades de caer en la adicción de cualquier tipo de droga y cómo puede afectar su consumo, no sólo psicológica sino también físicamente. Al ofrecer drogas a una máscara de teatro sonriente, ésta deja de tener esa expresión a medida que se le va aumentando la dosis, para acabar convirtiéndose en un rostro demacrado.

"Yo controlo…" Es la típica expresión de los jóvenes que han bebido y van a coger el coche. ¿Realmente controlan? Una pantalla muestra una simulación de los riesgos de conducir borracho o habiendo fumado cannabis. Como si fuese un videojuego, se ven las manos del conductor en el volante y el salpicadero del coche. En manos de una persona ebria, el coche va de un lado a otro, hace adelantamientos peligrosos y la conducción es de lo más temeraria, pudiendo ocasionar un accidente.

En esta exposición no se diferencia entre drogas legales e ilegales (el alcohol puede llegar a ser de las más peligrosas), ni se emiten juicios morales. Tan sólo se presentan los hechos, los efectos sobre el organismo, para estimular el espíritu crítico de los adolescentes y que ellos mismos decidan sobre las drogas. Todos los estupefacientes comportan un riesgo y no existe un consumo que se pueda considerar seguro. La muestra rompe tópicos como por ejemplo que los adictos so personas marginadas.

En el siglo XXI las cosas han cambiado: el nuevo perfil de consumidor es una persona que puede estar bien integrada en su entorno, que consume siguiendo unos patrones culturales y que se piensa que lo controla. Según datos de la Generalitat, los jóvenes de entre 14 y 18 años consumen alcohol como mínimo una vez al mes, mientras que un 25% fuma cannabis y un 2,5% toma cocaína.

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